sábado, noviembre 24

Ojos así

Y mientras todo se inundaba de tristeza y contrariedad, él la mira con sus ojos bellos y le susurra palabras que en ella provocan total tranquilidad y ¿cómo alejarse de él?, aunque debe irse, ya es hora, no quiere alejarse de él ni por un segundo. ¿Dónde encontraría la misma paz que él le entregó? Además ¿lo vería otra vez?, apenas conocía su nombre, solo conocía sus ojos, su sonrisa, esa paz y que , desde ese momento, no lo olvidaría nunca.


* El detalle de este texto es que cuando lo escribí aún no lo conocía, fue simplemente algo así como intuición, esa que nunca falla, la que me inspiró a escribir.

viernes, noviembre 16

Instantes... de aquellos.

(...) Pasaba los minutos, la música sonaba fuerte, nos ensordecía, solo era posible hablar cerca, al oído... tomé su mano (la de él) y nos internamos en la multitud, bailamos al ritmo de la música, sonidos electrónicos, luces y oscuridades, negro dominante. Mi cuerpo acercándose al suyo, lo extraño era que no lo parecía. La música y las luces, el alcohol, la chica de ojos intimidantes, mi amiga, bailando juntas estábamos, sus ojos y los míos encontrándose, diciéndome cosas a las que no sucumbíriamos, salvo un solo momento... el chico a mi espalda, ella me acercaba a él, ella se acercaba a mí, quedaba sin espacio, caí en el juego, siempre estuve en él, sintiéndonos, roces, manos tomadas, rodillas, piernas topándose, sus manos en mi cintura, los sonidos callaban, un descanso. (...) Yo y el chico, bailábamos, acercándonos, buscándonos, la atracción se hacía patente, rozándonos, los ojos cerrándose, su boca encontrando la mía, yo en el juego seducida, aceptándolo, colgada de su cuello luego, meciéndonos lentamente, el mundo no existía, me perdía en el breve, intenso y eterno instante de un beso ... era un placer el silencio que nos envolvía cuando los labios se encontraban. (...) La chica y sus ojos verdes, me invitaba a beber... búsqueda de última hora, su mano entra la multitud salía y me tomaba la mía. Y los excitantes sonidos nos provocaba a acercarnos, una cierta cercanía que para los dos no era intimidante, los cuerpos y el ritmo hablaban. Y él también ahí, poco entendiendo de tanta complicidad, dejándose llevar por instintos animales, salvajes, eróticos. Y ella bajando... yo tomando su cabello, un tremendo frenesí, solo dos, solo tres, ella mirando, abrazando, lanzándome al suelo y su cuerpo sobre mí, la oscuridad escondía las siluetas, todo el mundo delirando, ciertos roces, cierta humedad, brevedad, manos, puramente dejándose llevar por el ritmo y erótico ambiente, un contexto del todo intenso...

viernes, noviembre 9

Algo más que intenso

Estaba inquieta, recordaba la no llamada, el ruido de los autos al pasar mostraba el inalterable pasar de los segundos... Buscaba alguna posibilidad de encontrar alguna compañía para el recorrido... mirando nerviosa lo vi, en aquella esquina donde hace mese divise otra silueta, esperando. Era, prácticamente, un extraño, lo había visto solo un momento, sólo me fije en sus lindos ojos y por casualidad supe su nombre...
Le hablé, algo inconsciente me impulsó a hacerlo, le costó un instante reconocerme... comenzamos a conversar, nos fuimos juntos hacia Viña del Mar... se suponía una noche especial, pero nunca esperé que hasta ese punto.

(continua)

viernes, noviembre 2

mariposas, mariposas...♪


y sus diminutas alas
me hacen cosquillas...